Brasil: deseaba tener los brazos de 'Hulk' humano y casi los amputan
Un fisicoculturista que quería ser como el Increíble Hulk convirtió su vida en un infierno de dolor cuando se empezó a inyectar aceite y alcohol en sus brazos para hacerlos más grandes.
Romario Dos Santos, de Brasil, y padre de un niño, se inyectó un cóctel letal que ahora le causa mucho dolor. Él quería que sus bíceps crecieran 25 pulgadas; lo logró, pero con graves consecuencias.
La sustancia llamada "Synthol", una clase de relleno sintético se endureció y debido al dolor fue a ver al médico.
Sus músculos eran como piedras y presentaba un cuadro de "necrosis".
Cada doctor le decía lo mismo: hay que amputarle los brazos.
Luego de conocer esta noticia, Dos Santos entró en depresión, al punto de intentar quitarse la vida cuando su esposa tenía 6 meses de embarazo.