"Confirmamos la validez de la certificación de reservas, efectuada al 31 de diciembre de 2017, que estima que Bolivia tenía, a esa fecha, 10.7 TCF de reservas probadas totales; 12.5 TCF de reservas probadas más probables (mejor estimado) y 14.7 TCF de reservas probadas más probables más posibles de gas", señala el documento.

Asimismo, la certificadora explica que las reservas fueron estimadas para cada campo y que se crearon pronósticos de producción para cada pozo. 

"La metodología usada para la estimación de las reservas fue dictada por la madurez de la producción de cada campo. Sproule utilizó la información técnica y económica provista por los operadores del upstream, tanto públicos como privados que operan en Bolivia".

La conclusión -de acuerdo a Sproule- se sustenta en un trabajo técnico realizado a lo largo de cinco meses (abril y agosto de 2018), y que se adhirió a las definiciones de la metodología de evaluación y certificación de reservas establecida por el PRMS (el estándar internacional de estimación de reservas y recursos de hidrocarburos).

Sproule es una firma canadiense con más de 65 años de experiencia en certificaciones de reservas, caracterización de yacimientos, asesoría estratégica y gestión de activos energéticos.

Sproule ha trabajado en más de 50 países "donde hemos completado más de 20.000 proyectos específicos. En el ámbito concreto de la certificación de reservas, prestamos servicios a más de 250 clientes anualmente. 

La firma canadiense explicó que las certificaciones de reservas que realizan se "rigen por los estándares establecidos en los manuales de definiciones y pautas de evaluación de reservas usados a nivel mundial. En el caso de Bolivia, se usaron las pautas establecidas por la Sociedad de Ingenieros Petroleros y el PRMS. En todos los proyectos aplicamos el más estricto rigor metodológico y técnico. Todo el personal técnico involucrado en la preparación de los informes de reservas son ingenieros o geocientíficos profesionales, y se rigen por el Código de Ética Profesional de la Asociación de Ingenieros, Geólogos y Geofísicos Profesionales de Alberta (APEGA por sus siglas en inglés), la cual controla la práctica de estas disciplinas técnicas en la Provincia de Alberta, Canadá".

Finalmente, la empresa Sproule reiteró que "la acción del senador Ortiz está causando un daño irreparable a la reputación y el prestigio de nuestra empresa, por lo tanto, nos reservamos el derecho a emprender cualquier acción legal correspondiente".