TIERRA NOTICIAS. Policías de la Unidad Táctica de Operaciones de la Policía (UTOP) agredieron a empujones y patadas a los periodistas Sergio Gandarillas, de Radio Splendid, y al reportero de la Red Uno de televisión, Moisés Cornejo, y el hecho mereció un enérgico rechazo de la Asociación Nacional de la Prensa de Bolivia (ANP) que exigió al Comandante General de la Policía una investigación y sanción a los responsables del abuso de autoridad.

Dos heridas (escoriaciones) en el tercio medio de la pierna izquierda de Cornejo, de 4 por 2,5 centímetros, fueron certificadas por la médico forense del Instituto de Investigaciones Forenses de La Paz, Nancy López, que otorgó dos días de incapacidad al periodista.

Cornejo y Gandarillas realizaban la cobertura de las protestas de dirigentes de pueblos asentados en el Territorio Indígena y Parque Nacional Isiboro Sécure (Tipnis) en la Plaza Murillo de La Paz, y su labor fue interrumpida por policías antimotines que impedían la grabación de imágenes y declaraciones de los manifestantes.

"De un momento a otro nos empezaron a empujar, mi persona le dijo a uno de ellos que nos dejen hacer nuestro trabajo. El jefe vino me increpó me pidió mi credencial, me empezó a decir que ‘quién era (yo) para decirle cómo hacer su trabajo'", relató Gandarillas a la Agencia de Noticias Fides (ANF).

La ANP considera a la agresión un exceso inadmisible y un desconocimiento a la función informativa de reporteros, camarógrafos y fotógrafos, y recordó a la Policía que el parágrafo tercero del Artículo 106 de la Constitución Política del estado (CPE) "garantiza a las trabajadoras y los trabajadores de la prensa, la libertad de expresión, el derecho a la comunicación y a la información".

La Policía tiene por misión cumplir y hacer cumplir las normas que protegen el trabajo periodístico, expresa el pronunciamiento de la ANP.